El presidente del PP de Ávila, Carlos García, ha lamentado que, una vez más, “el Gobierno de Pedro Sánchez discrimine a Castilla y León, y especialmente a Ávila,” en el reparto de ayudas al sector primario frente a la sequía que ha publicado el BOE.

García apunta que “el Gobierno ha hecho, de nuevo, lo que estamos acostumbrados a ver día tras día, pero lo que no vamos a dejar de denunciar: utilizar los recursos de todos los españoles a discreción, en función de sus intereses electorales y desatendiendo la realidad de provincias como la nuestra y de regiones como Castilla y León, que tienen en el sector primario uno de los pilares de su economía”.

“La excusa”, subraya el presidente del PP de Ávila, “es que, oficialmente, Castilla y León se encuentra en ‘riesgo medio’ de sequía, una falacia que se contradice con la realidad que palpan a diario los agricultores y ganaderos de Ávila”, que se debe a que “el Gobierno de España es incapaz de adelantarse a los problemas graves si afectan a un territorio que no le es afín… prefiere dejar que golpeen fuerte”, y lanza un mensaje de “apoyo, comprensión y responsabilidad” hacia las organizaciones profesionales agrarias, junto a las que “vamos a estar, escuchando y acordando medidas que den seguridad y futuro a quienes se dedican al campo”. Las ayudas por riesgo medio de sequía son exactamente la mitad que por riesgo alto, y Castilla y León es la comunidad con mas superficie de agricultura de secano de toda España.

Carlos García compromete “toda la fuerza que el PP tiene ahora y va a tener en las instituciones a partir de las elecciones del 28 de mayo, para seguir trabajando en favor del sector primario abulense, como hacemos siempre, de la mano de sus protagonistas, agricultores y ganaderos, y para reivindicar y denunciar lo que necesitan, más aún ante una cosecha catastrófica como la que se avecina”. Estamos “a dos semanas de que los abulenses y el resto de los españoles tengamos la primera vuelta para derogar el sanchismo en las urnas y comencemos a abrir una nueva etapa que no margine territorios, que no discrimine personas en función de dónde viven o a qué se dedican, que no conceda prebendas a los enemigos del interés general de los españoles”.